Calle Monsalves, 6 41001 Sevilla
Teléfono 626 47 24 27
En los últimos años es común escuchar el término abacería entre los nuevos negocios de hostelería sevillanos. Las abacerías son una evolución de aquellos establecimiento donde se vendían legumbres secas, bacalao, aceite, vinagre, etc. En la actualidad la acepción de abacería se refiere a los espacios que utilizan productos de calidad, además de la venta de algunos de ellos, como los vinos a granel. Un lugar donde tomar una cerveza Cruzcampo bien fría con el tirador clásico de la Cartuja y disfrutar de la gastronomía local de un modo informal, con productos de gran calidad a precios asequibles.
Hoy hacemos parada en Abacería El Sereno (antigua abacería Monsalves). Un nuevo establecimiento que ofrece cocina y productos nacionales, en un entorno acogedor, con apetitosas especialidades que te sorprenderán. Situado en una de las mejores zonas del centro de la capital, en Abacería El Sereno podéis encontrar guisos, caracoles, conservas, chacinas, quesos o montaditos. Al entrar vemos una larga barra de pino y al fondo un pequeño salón en nivel más bajo donde hay mesas altas y barriles. El local está decorado con alusiones a la figura del sereno, con faroles colgando de sus paredes y manojos de llaves como los que portaban antaño los encargados nocturnos de vigilar las calles y regular el alumbrado público.
Al frente de este proyecto abierto en marzo de este año encontramos cinco socios muy jóvenes pero con experiencia hostelera. A nosotros nos atiende Ignacio del Pino, joven pero muy atento a sus clientes y sabiendo aconsejar en todo momento. Probamos los chicharrones de Cádiz 2,50€ y un queso de oveja con chili 2,50€ que nos sugirió Ignacio. Abacería El Sereno no tiene cocina, la oferta es toda quinta gama que compran a sus proveedores, desde las latas hasta las recetas de guisos caseros del día, como los caracoles, espinacas con garbanzos, bacalao con tomate o garbanzos con bacalao.
Chacinas como el salchichón ibérico en taquitos 2,50€, caña de lomo ibérica 3,50€, carne mechá 2,50€, morcilla de lomo de cerdo ibérico 2,50€, jamón ibérico en taquitos 3,50€, chicharrón sevillano 2,50€, mojama 3,50€ o huevas de maruca 3,50€. Quesos como Don Apolonio en aceite 2,50€, rulo de queso de cabra gratinado 3,50€, queso viejo de oveja 2,50€, Gouda con cominos 2,50€, Revidoux 2,50€, queso azul de hoja 2,50€ o surtido de quesos 8,00€. Hay montaditos como el de carne mechá con cebolla y mayonesa de mostaza y miel 2,50€, melva canutera y pimientos 2,50€, chorizo y cabrales 2,50€, tortilla al whisky 2,50€ o jamón y salmorejo 3,00€. Panes de la casa de anchoas con tomate y mayonesa de wasabi 10,00€, salmón y queso 8,00€ o el matrimonio de conveniencia 10,00€.
Patés como el mousse de pato, de jabalí, de ciervo, de perdiz o de cabracho, todos a 4,80€. Conservas como los mejillones en escabeche Balea 3,50€, lomo de atún rojo de almadraba Petaca Chico 10,00€, anchoas del Cantábrico 2,50€, boquerones en vinagre 3,00€ o la melva canutera en aceite de oliva 3,00€. Hay un apartado de “Latas al toque” donde encontramos chipirones en su tinta sobre arroz 7,00€, alubias con almejas y setas 7,00€, bonito a la sidra sobre arroz 10,00€ o fabes con jabalí 7,00€. Sugerencias de la casa como la ensaladilla 3,00€, canelones con carrillera de ternera 4,50€ o la tortilla de patatas al whisky 3,00€.
En cuanto a la bodega encontramos siete referencias de blancos, con vinos como Ojos de Gallo 3,00€/16,00€ o Martín Codax 3,00€/16,00€, otros tantos tintos, con referencias como Luis Alegre 2,50€/14,00€, Conde de San Cristóbal 3,80€/22,00€ o Marques de Vargas 25,00€ la botella. Gran variedad en vermús, anises y brandis, cavas, licores y cremas. Pero donde realmente destaca El Sereno es en los vinos de Jerez, con más de 70 referencias, casi todos ellos por copa, con sugerencias de la semana que van rotando para ofrecer nuevas propuestas a sus clientes.
Otro punto fuerte de este establecimiento son los desayunos con panes de La Algaba con todo tipo de acompañamientos. Tiene un amplio horario de apertura todos los días, comenzando con el desayuno y cerrando de madrugada. Este grupo de emprendedores no llegan a la treintena. Sin embargo, y pese a su juventud, han decidido dedicar parte de sus vidas a un sector tan competitivo y arriesgado como es el de la hostelería. Su juventud, sacrificio e ilusión les ha llevado a poner en marcha este bonito, pero duro negocio, donde lo único seguro son los pagos a los proveedores. Aun así, nadie les va a quitar su sueño de triunfar. Desde estas páginas les deseamos toda la suerte del mundo. Recomendable. Volveremos.
